La víctima mortal es un hombre de unos 40 años al que encontraron ya sin vida entre los escombros de un piso en el que impactó un misil poco después de medianoche.
Del mismo edificio fue rescatada una mujer de unos 60 años en estado crítico y seis personas más con heridas leves.
Otros proyectiles que cayeron en Netivot y Sderot causaron daños significativos y heridas menores a sus ocupantes, además de provocar incendios en el área circundante.
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La Estrella de David Roja (Maguen David Adom, equivalente a la Cruz roja) señaló a primera hora de la mañana que había atendido a 53 personas, 23 de ellas heridas por esquirlas de metralla, pequeños fragmentos de cristal, inhalación de humo o accidentes al correr hacia los refugios antibombas. Además, 27 personas sufrieron ataques de ansiedad.
Horas antes, el servicio de ambulancia israelí informó que 34 ciudadanos fueron hospitalizados con heridas y en un estado de estrés en las localidades de Shaar Hanegev, Ashkelon y Sderot.
El lanzamiento de más 300 proyectiles sobre Israel respondía a la operación israelí que causó ocho muertos en Gaza, siete milicianos palestinos y un oficial israelí.
Las fuerzas israelíes también bombardearon la Franja, provocando al menos tres muertos, según médicos locales.
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En particular, el Ejército israelí atacó objetivos del grupo palestino islámico Hamás, entre ellos el edificio de la televisión Al Aqsa, y de la Yihad Islámica como túneles, presuntos centros de fabricación de armas y lanzaderas de misiles.
Israel desplegó más soldados y tanques en los límites con Gaza, así como baterías adicionales para la defensa antiaérea Cúpula de Hierro.