Sorprendente lado "humano" de Hitler: una tierna foto del líder nazi con una niña judía sale a la venta

Una inusual foto se pondrá a la venta en Estados Unidos. La imagen muestra a una pequeña niña judía, Rosa Bernile Nienau, abrazada por el líder nazi Adolf Hitler. Lo sorprende es que el Führer mantuviera su simpatía respecto a la pequeña incluso después de conocer sus raíces.

"La querida y considerada Rosa Nienau, Adolf Hitler, Múnich. 16 de junio de 1933", dice la foto firmada por el propio líder nazi.

Rare signed photo of Hitler embracing Jewish girl Rosa Nienau to be sold at auction pic.twitter.com/nfw8vQsr3M

— Thommas (@jlevi53) 9 ноября 2018 г.

La imagen se tomó en Berghof, donde la niña fue presentada a Hitler, puesto que ambos cumplían años el mismo día.

"Lo interesante de esta pieza es que Rosa, según los estándares alemanes, era considerada judía. Y lo particularmente interesante es que Hitler, que sentía mucho cariño por la niña, continuara su relación con ella incluso después de enterarse de que era judía", comentó el subastador Bill Panagopulos de la casa de subastas Alexander Historical Auctions, donde la foto se pondrá a la venta el 13 de noviembre.

El especialista añadió que este documento único permite ver el lado "humano" de Hitler y que representa algo absolutamente opuesto "a lo que el mundo cree que fue".

El fotógrafo del líder nazi y autor de la imagen, Heinrich Hoffman, mencionó en su libro 'Yo fui amigo de Hitler' a una niña llamada Berneli. Algunos especialistas opinan que podría referirse a Rosa.

"Ocurrió que una niñita encantadora llamó la atención de Hitler. Habló con ella largo rato y rogó a su madre que se la volviese a traer alguna vez. La pequeña Berneli llegó a ser la preferida oficial del Führer", escribió fotógrafo.

La amistad entre Rosa y el 'tío Hitler' duró hasta 1938, cuando se le ordenó a la familia que cesara el contacto con los miembros superiores del partido, incluido Hitler.

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Según escribe Hoffman en su libro, "Hitler detestaba resolver problemas desagradables; pero aquella vez su desprecio se dirigió contra los que habían denunciado a la niña. Si hubiesen retenido su lengua, nadie habría salido perjudicado. Ahora era ya demasiado tarde y él comprendió que, en buena lógica, debía negarse a ver de nuevo a Berneli. Pero suspiró: 'Hay gente que tiene el talento de privarme de mis más inocentes placeres'".

Cinco años más tarde, en plena Segunda Guerra Mundial, Rosa murió debido a una poliomielitis, a la edad de 17 años.

Mientras tanto, Panagopulos admitió que "no se sabe exactamente si todo esto se hizo con fines de propaganda o si realmente Hitler sentía cariño a la niña".

El precio estimado de la fotografía en la subasta es de 7.500-10.000 dólares.