Según el periódico, el coronel debía recopilar la información sobre la Fuerza Aérea de Austria, los sistemas de artillería, la crisis migratoria, así como datos sobre muchos militares austriacos de alto rango.
Añade que cada dos semanas contactaba con un ruso, un tal Yuri.
El residente de Salzburgo comenzó a espiar en los años 1990 y ha ganado 300.000 euros por su actividad.
La reacción de Rusia
El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, criticó, por su parte, a los socios europeos por no recurrir a la diplomacia tradicional, sino a la de micrófono.
"Recientemente, por desgracia, nuestros socios occidentales han establecido como norma recurrir no a la diplomacia tradicional, con toda decencia, sino a la de micrófono, a la diplomacia de los megáfonos, culpándonos públicamente y exigiendo hablar públicamente sobre un asunto del que no sabemos nada. Es necesario seguir las normas que se desarrollaron en la práctica de la comunicación internacional", dijo Lavrov.
La Embajada de Rusia en Austria y el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia rehusaron comentar a Sputnik el asunto.
Asimismo el embajador austriaco en Moscú, Johannes Eigner, será convocado al Ministerio de Exteriores de Rusia, informó a Sputnik un portavoz de la cartera.
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"El embajador de Austria será citado el viernes [9 de noviembre] al Ministerio de Exteriores de la Federación Rusia", dijo.
La reacción del canciller de Austria
El Canciller de Austria, Sebastian Kurz, confirma que excoronel austriaco es sospechoso de espiar a favor de Rusia.
"Tenemos que informarles que Austria sospecha que un coronel retirado de las Fuerzas Armadas de Austria ha trabajado con el servicio de inteligencia ruso durante muchos años; según nuestra información, esto comenzó en los años 1990 y duró hasta 2018", afirmó.
Señaló también que teniendo en cuenta el reciente escándalo en torno a espías rusos en los Países Bajos la sospecha se confirmará.
Kurz señaló que tales casos "sean en los Países Bajos o Austria, no mejoran las relaciones entre Rusia y la Unión Europea" y pidió a Rusia información "transparente" sobre el sospechoso.
El canciller comunicó que por el caso del presunto espionaje la ministra de Exteriores de Austria, Karin Kneissl, convocó a un representante ruso y canceló su viaje a Rusia, previsto para inicios de diciembre.
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"La ministra de Exteriores (…) convocó a un representante ruso al ministerio y canceló su viaje a Rusia", dijo Kurz a la prensa.
La reacción del Ministerio de Defensa de Austria
"El Departamento de Contrainteligencia Militar con la ayuda internacional reveló un caso de espionaje. Un oficial retirado del Ejército austriaco ha estado involucrado en espionaje desde los años 1990 y ha comunicado datos a Rusia. Se ha abierto un caso en su contra", tuiteó el portavoz del ministerio, Michael Bauer.
Por su parte el titular de Defensa austriaco, Mario Kunasek, aseguró que una "agencia amiga" le avisó de un excoronel que supuestamente espiaba para Rusia.
"Una agencia amiga nos dio esta información hace algunas semanas atrás", dijo a la prensa.
El ministro agregó que su departamento mantuvo conversaciones para establecer su identidad y luego habló con el coronel retirado hace cinco años del Ejército austriaco.
"El exoficial nos entregó algunos equipos que actualmente están siendo analizados", indicó.
