Sobre todo porque Estados Unidos acusa a China de robar secretos comerciales y pide a sus aliados que limiten la venta de tecnología militar y de doble uso a Pekín. El contrato firmado entre británicos y chinos, a juzgar por los documentos a lo que ha tenido acceso la prensa, fue aprobado por las autoridades del Reino Unido en abril y los términos del acuerdo hacia finales de enero o principios de febrero, durante la visita a China que realizó la primera ministra británica, Theresa May.
¿Y cómo ven en China la decisión del Gobierno del Reino Unido? Mei Xinyu, experto del Instituto de cooperación comercial internacional del Ministerio de Comercio de China, señala a Sputnik que no cabe duda de que el Reino Unido es el mayor aliado de Estados Unidos en el mundo occidental y que, sin embargo, los intereses nacionales de ambos países y sus estilos de hacer política no coinciden. El Reino Unido reconoce que la tecnología china ya ha alcanzado un cierto nivel en algunos aspectos", explica.
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Añade que incluso en la cuestión de la contención de China, EEUU y el Reino Unido no siempre mantienen la misma postura y que incluso cierto número de estadounidenses espera que su país pueda mantener relaciones normales con China.
"Está claro que el acuerdo entre China y el Reino Unido será una gran decepción para aquello que ven en China una amenaza y habla de la necesidad de contenerla", añade Mei.
