El ministerio de Seguridad de la provincia había ofrecido una recompensa de más de 13.500 dólares para aquellos que aportaran información sobre el paradero de la menor, pero Ayala fue encontrada muerta el 18 de octubre en un hueco contiguo al edificio en que viven sus tíos paternos Leonela Ayala y Fabián González.
Luego del hallazgo del cuerpo, su tía Leonela de 23 años y embarazada a término, admitió haber cometido el crimen junto a su pareja. Según trascendió a los medios, dijeron que estaban "muy drogados para saber lo que pasó".
Según la Policía Científica, el cuello de la menor presentaba unas marcas que sugieren que la niña fue ahorcada con una sábana blanca con dibujos infantiles. La niña tuvo una muerte violenta con signos compatibles de abuso sexual, refiere La Nación.
No obstante, este 19 de octubre se realizará la autopsia correspondiente para determinar las causas y la fecha exacta de la muerte.
Antes de encontrar el cuerpo la tía Leonela había puesto el foco de la desaparición en la madre de Sheila, a quien acusó de narcotraficante, pero esta hipótesis quedó descartada tras la confesión.
El caso de Sheila Ayala se suma a la lista de niños desaparecidos que han conmocionado Argentina. Una situación muy similar se vivió en 2011 con la desaparición de Candela Rodríguez, secuestrada en agosto de 2011 en la localidad de Hurlingham, en la zona oeste del gran Buenos Aires.
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El cuerpo de Candela fue encontrado nueve días después con signos de asfixia a tres kilómetros y medio de su domicilio. Dos hombres recibieron prisión perpetua por este crimen.
En 2015, otro caso de horror tuvo lugar en la provincia de Buenos Aires, esta vez en el partido de Malvinas Argentinas donde fue hallado el cuerpo de Gabriel Barraza, de seis años.
Más de 200 policías participaron en la búsqueda de Bazarra, al que encontraron oculto dentro del tronco de un árbol con signos de abuso sexual. El responsable de la muerte fue un expresidiario vinculado con la familia al que cariñosamente llamaban "el tío".
El caso más reciente saltó a los medios en marzo cuando Ana Gómez denunció la desaparición de su hijo Alexis Maman de tres años desde la ciudad de Palpalá, provincia de Jujuy. Los jujeños quedaron conmocionados con el relato de la madre, que al final se quebró y confesó haber ahogado a su hijo.
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