La Boquería, un gustazo gastronómico (Barcelona, España)
El mercado de San José, conocido popularmente como La Boquería, es uno de los más conocidos no solo de España, sino de toda Europa. Su historia se remonta al siglo XIII, cuando a las afueras de Barcelona se reunían los vendedores de carne. A principios del siglo XIX, con la expansión de la ciudad, el mercado recibió su estatus oficial e inauguró su pabellón cubierto.
Hoy día, La Boquería se encuentra en el paseo de La Rambla, por lo que, además de ser un lugar donde se puede comprar todo tipo de productos frescos, es también una de las principales atracciones turísticas de Barcelona. Aquí hay cada vez más establecimientos regentados por comerciantes de todo el mundo, en los que se encuentran especialidades de Italia, Grecia, los países árabes e incluso Japón.
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La Boquería es un lugar de visita obligada para los amantes de la comida. Verduras, frutas, granos, quesos y, cómo no, espléndidos embutidos y jamones. Aquí encontrarás todo lo necesario para un verdadero tour gastronómico.
Gran Bazar, todo el mundo en un solo lugar (Estambul, Turquía)
A tan solo un kilómetro de la mezquita Azul se encuentra el conocidísimo Gran Bazar. Construido a mediados del siglo XV, este mercado oriental es considerado uno de los más grandes del mundo: 45.000 metros cuadrados, más de medio centenar de calles, 4.000 tiendas, cafeterías, e incluso 20 fuentes y una sauna pública. El número de visitantes diarios oscila entre los 300.000 y los 500.000 dependiendo de la época.
El Gran Bazar, sin duda, era y sigue siendo uno de los puntos de encuentro de Oriente y Occidente, del sur y del norte. Delicias francesas y alfombras persas, caviar de Siberia y especies de la India, madera tallada de África y porcelana china. No hay cosa que no se pueda encontrar aquí.
Pero lo más pintoresco del Gran Bazar son los propios vendedores. Cientos de comerciantes te estarán esperando con ansia negociadora, así que no los defraudes y regatea los precios.
Mercado Izmáilovo, un tesoro para coleccionistas (Moscú, Rusia)
Lejos del centro de Moscú, fuera de las principales rutas turísticas de la ciudad, podrás encontrar un auténtico castillo salido de un cuento de hadas. Es el Kremlin de Izmáilovo, un pintoresco lugar de recreo que alberga también uno de los mercados más peculiares del mundo.
El mercado de Izmáilovo es el lugar ideal para la compra de los típicos suvenires rusos. Matrioshkas, gorros ushanka, artesanía, pañuelos de seda… Aquí podrás encontrar todo a precios mucho más bajos que en el centro de Moscú. Pero por lo que de veras vale la pena visitar Izmáylovo es por sus auténticas reliquias de la época soviética: desde antiguas cámaras fotográficas y discos de vinilo hasta medallas y pancartas. Un verdadero tesoro para los coleccionistas.
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El mercado está abierto todos los días, pero sin duda sus jornadas estrella son el fin de semana, cuando entre sus murallas se celebran festivales de danza y juegos tradicionales rusos.
Mercado de Otavalo, artesanía de colores (Otavalo, Ecuador)
A dos horas al norte de Quito, la capital ecuatoriana, se encuentra uno de los mercados de artesanía al aire libre más grandes de Latinoamérica. Al que lo visita por primera vez, le podría parecer que ha llegado a una fiesta de colores.
Verduras, flores, cuadros y atuendos de colores increíblemente brillantes y saturados abundan donde quiera que detengas la vista. Pero por lo que verdaderamente vale la pena visitar el mercado es por la colorida y original artesanía indígena. Puestos de marroquinería, cerámica, arte plumario, hamacas, tejidos e hilados tradicionales.
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Cuando más concurrido está el mercado es el sábado, día en que bajan los nativos de las aldeas cercanas para comprar y vender sus productos. El propio viaje hasta Otavalo es impresionante por sus paisajes, el volcán Cayambe, el Oyacachi.
Tsukiji, lo más fresco del mar (Tokio, Japón)
El principal mercado de pescadería de todo Tokio (Japón) y, quizá, de todo el mundo. Se estableció a principios del siglo XX y rápidamente logró convertirse en uno de los lugares de referencia de la ciudad, sobre todo para todos los amantes de los mariscos y la cocina japonesa.
En Tsukiji podrán encontrar 400 tipos de productos marinos, desde pulpos y langostas, hasta algas marinas y los exóticos pepinillos de mar. Pero lo que más atrae a los turistas de todo el mundo son sus populares subastas de atún. Cientos de chefs y expertos culinarios de toda la nación isleña se reúnen temprano en la madrugada en el centro del mercado para batirse por los atunes más jugosos y ofrecerles a sus clientes el sushi más fresco posible.
