"Anunciamos la imputación de cargos contra siete militares rusos por la violación de varias leyes criminales de EEUU por varias actividades cibernéticas contra EEUU y sus aliados", dijo Demers en rueda de prensa.
"[Los agentes] tenían como objetivo a Westinghouse, la compañía nuclear con sede en Pittsburgh, Pennsylvania, que provee de combustible nuclear a Ucrania", dijo a la prensa el fiscal para el distrito oeste del estado de Pennsylvania, Scott Brady.
Te ma relacionado: El Foreign Office acusa a la inteligencia militar rusa de ciberataques indiscriminados
Además, informó que al menos 250 atletas de 30 países estaban también entre los objetivos de estos supuestos agentes, así como varias agencias anti dopaje de EEUU, de Canadá, y de otros países.
Cuatro de los siete acusados intentaron asimismo hackear a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), agregó.
"Esta imputación alega una conspiración para un ciberataque con el objetivo de obtener información personal de la salud de atletas de parte de agencias antidopaje y federaciones deportivas en varios países", afirmó por su parte el vice fiscal general para la Seguridad Nacional, John Demers.
Te puede interesar: ¿Pueden los hackers rusos provocar un apagón en EEUU?
Por su parte el director adjunto del FBI para la División Cibernética, Eric Welling, señaló que EEUU considera que los acusados se encuentran actualmente en Rusia.
"Creemos que los agentes del [servicio de inteligencia ruso] GRU nombrados en esta demanda se encuentran en Rusia y no pueden responder inmediatamente a los cargos", dijo el funcionario a periodistas.
El Ministerio de Exteriores ruso dijo este 4 de octubre que la obsesión occidental con el espionaje está proliferando, pero que Moscú no incurrió ni incurrirá en el lanzamiento de semejantes ataques pues no tiene interés en ellos.
A su vez, una fuente de la cancillería rusa dijo a Sputnik que Rusia no tenía ninguna necesidad de hackear los sistemas de la OPAQ pues tiene acceso a toda su información.
