En primer lugar, se trata de la muerte de quince soldados rusos. En segundo lugar, surge la pregunta de en qué contexto y por qué se hizo posible esta cadena de accidentes. Y en tercer lugar, se plantea que se eviten para siempre este tipo de accidentes.
Por eso, la posición públicamente expresada por Israel, que acusa a los sirios de disparar al azar y no saber manejar el sistema de defensa antiaérea, parece ser inaceptable no solo para Rusia, sino también para Israel mismo, analiza el periodista.
"La respuesta de Rusia al derribo del Il-20 sería en extremo desagradable para Israel" https://t.co/zpSkjknWeX
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) September 22, 2018
Según el columnista, Rusia se ha convertido en un 'moderador de guerra' no solo porque con su ayuda el Estado sirio abolió su sentencia de muerte y va liberando su territorio de los terroristas metro por metro, sino también porque, a diferencia EEUU que se empeñaba en ejercer las funciones de árbitro, Rusia realmente estudia, entiende y tiene en cuenta la soberanía y los intereses de los participantes, incluyendo los intereses de Israel.
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Rusia apoyó al Estado hebreo en repetidas ocasiones: se trata, en particular, de una mediación en la retirada de las fuerzas proiraníes desde las áreas cercanas al territorio israelí. Y el rechazo del acuerdo ya concluido sobre la entrega de los sistemas S-300 a Siria valorado en medio billón de dólares, ya que el alcance del sistema cubría todo el territorio israelí. La lista es larga. Rusia demostró que valora las relaciones con Israel y comprende su posición.
Sin embargo, este respeto y comprensión no puede ser unilateral, enfatiza el periodista. Es solo cuestión de tiempo para que el incumplimiento bilateral e igualitario de las reglas haga daño al propio infractor.
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Marajovski señala que las Fuerzas Armadas de EEUU, competencia global de Rusia y país que tiene una relación terrible con Rusia, cumple las reglas de la guerra siria de forma muy rígida y coordina sus acciones con sus homólogos rusos.
El resultado fue esa cadena trágica que llevó a la muerte de los soldados rusos.
Como esto ya es un hecho, es simplemente inapropiado intentar demostrar que es culpa de los sirios. Porque el propósito de la diplomacia militar consistió precisamente en garantizar la seguridad de los militares de los Estados que operan en la región. Y se asumió que todos los diplomáticos participantes garantizarían esta seguridad.
Israel ahora está eligiendo entre dos opciones simples. O bien asume la responsabilidad de garantizar que no se produzcan otros accidentes trágicos con los aviones rusos. O se niega a asumir esta responsabilidad y, por lo tanto, la vuelca a Rusia que actuará en este caso independientemente de los acuerdos con Israel.
Los métodos para garantizar la seguridad de los militares rusos son obvios: por ejemplo, los aliados sirios carecen de defensa aérea avanzada, y Rusia puede ayudar a mejorarla, explica el columnista.
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Existe la opinión de que este desarrollo de la situación no será muy agradable para Israel. Y, por lo tanto, es sumamente importante que les explique a sus militares que es necesario proteger la vida de los rusos y evitar maniobras que la pongan en peligro, concluye Marajovski.
