Se prevé que en los ejercicios tomarán parte 300.000 militares, 36.000 tanques, blindados y otros vehículos y más de un millar de aeronaves.
"Imagínense 36.000 unidades de equipo militar moviéndose simultáneamente (…) y todo se llevará a cabo en las condiciones más cercanas a las de un verdadero combate", resaltó el jefe del Ministerio.
El analista militar Víctor Baranets explicó a Sputnik qué diferenciará a las maniobras de Zapad 81.
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El experto observó que en los ejercicios participarán tres veces más militares. El futuro evento también se desarrollará en un terreno extremadamente grande, ya que involucrará tanto al Distrito Militar central, como al del Este.
Además, todas las fuerzas de aviación formarán parte del entrenamiento.
"Otra peculiaridad —la más temible para el Pentágono y la OTAN— estriba en que en las maniobras también participarán militares chinos y unidades de Mongolia. Para EEUU y la OTAN, la colaboración militar entre Rusia y China es una pesadilla", declaró.
Baranets agregó que la mencionada cooperación se está haciendo cada vez más práctica y orientada hacia operaciones conjuntas.
A modo de conclusión, el analista aseveró que el futuro evento militar contribuirá a que EEUU y la OTAN se percaten de que en el mundo "hay fuerzas dispuestas a enfrentarse a sus aspiraciones globales".
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