"Nosotros vemos con extraordinaria preocupación lo que está ocurriendo en Nicaragua", dijo Sánchez desde San José, donde compareció de manera conjunta junto a Carlos Alvarado, presidente de Costa Rica.
No obstante, el dirigente español subrayó que España está comprometida en ayudar "a los nicaragüenses y no al régimen", por lo que la intención de Madrid es "seguir manteniendo la cooperación".
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"El error sería olvidarnos de aquellos que están sufriendo la represión del régimen", insistió.
En ese punto coincidió Carlos Alvarado, que instó a que la OEA lidere un proceso de "diálogo multilateral" para encontrar soluciones a la crisis.
Preguntado sobre la situación de los nicaragüenses que se refugiaron en Costa Rica tras los episodios de violencia de los últimos meses, Alvarado reiteró su intención de seguir prestando asilo pese a que el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, le solicitó hacer pública la lista de personas que solicitaron acceder a suelo costarricense.
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