"Un crimen nunca tiene justificación, sea del color político que sea, y tratar de asesinar a un presidente elegido por su pueblo es un hecho repudiable; solo quien pierde la razón apela a la fuerza, y eso es lo que está haciendo la derecha y la oligarquía ante la decisión de los venezolanos de no rendirse", dijo a Sputnik el médico Mario García, quien regresó de Venezuela hace dos meses donde trabajó en la atención a comunidades indígenas.
El 4 de agosto, un atentado con drones cargados de explosivos fue dirigido contra Maduro, en el momento que el mandatario ofrecía un discurso en la céntrica Avenida Bolívar, en Caracas, con motivo del aniversario 81 de la creación de la Guardia Nacional Bolivariana.
Te puede interesar: Aparece el vídeo de la explosión de un dron durante el atentado contra Maduro
Maduro resultó completamente ileso, pero siete efectivos de seguridad resultaron heridos por el efecto de los explosivos.
En esa misma línea opinó Ernestina Valdés, una jubilada cubana que cumplió tareas solidarias en Venezuela como enfermera hace algunos años.
"Lo que pasa es que no pudieron con Chávez, y se envalentonaron pensando que Maduro sería más fácil de derrocar, pero les salió el tiro por la culata; los venezolanos quieren a Maduro, y nosotros los cubanos también lo apoyamos con nuestra solidaridad", enfatizó Valdés.
El fallido atentado contra Maduro fue repudiado por los gobiernos de Cuba, Bolivia, Nicaragua, Turquía y Rusia, así como por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).