"El Comité de Investigaciones y el Ministerio de Exteriores están evaluando enviar a la República Centroafricana a un grupo de jueces instructores y criminalistas experimentados para investigar el asesinato", dijo en rueda de prensa.
El Ministerio de Exteriores ruso informó el 30 de julio que tres periodistas rusos —el cámara Kiril Rádchenko, el director de documentales Alexandr Rastorgúev y el corresponsal de guerra Orján Dzhemal— murieron en una emboscada en la República Centroafricana.
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Sus cuerpos fueron encontrados cerca de la ciudad de Sibut, situada a unos 300 kilómetros al norte de la capital, Bangui.
De acuerdo con la investigación que lleva a cabo este centro, los periodistas fueron asesinados con armas automáticas a 180 kilómetros de Bangui.
La República Centroafricana está sumida en un conflicto armado desde finales de 2013.
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Según los datos de la ONU, unas 6.000 personas perdieron la vida durante el conflicto y casi un millón se vieron obligadas a abandonar sus hogares.
La Cancillería rusa había informado que la República Centroafricana está inmersa en crisis y violencia, siendo escenario de constantes atracos a mano armada y asesinatos, por lo cual los visitantes de ese país están expuestos a grandes riesgos.
