El Mundial 2018 de Rusia fue el tercero para el periodista mexicano Enrique Cancino. Había trabajado como corresponsal en la Copa Mundial 2006 en Alemania y en la de 2010 en Sudáfrica. Así que tiene todo derecho a hacer comparaciones y asegurar que en Rusia "hicieron un Mundial perfecto, hicieron un Mundial fuera de errores".
Recordando los partidos más memorables del Mundial, nombró los que más le gustaron: "España-Portugal y Rusia-Croacia. Fueron de los más emocionantes para mí en este Mundial".
Sin embargo, la sorpresa más inesperada para él fue el equipo del país-anfitrión, los internacionales rusos, "se convirtieron en el favorito sentimental de la gente", sostiene.
"Rusia para mí fue la gran revelación de este Mundial porque no había tenido buenos resultados antes de que empezara el torneo. Pensábamos —los que nos creíamos expertos de fútbol- que Rusia quedaba fuera en la fase de grupos, que iba a jugar tres partidos y adiós", se entusiasmó.
Además, aseveró que Francia, ganador de la Copa 2018, "va a durar uno o dos mundiales más" (con su plantilla que triunfó en Rusia) y podrá "hasta repetir dentro de cuatro años en Catar porque son una generación de futbolistas muy interesante".
Te puede interesar: "Si tienen la oportunidad algún día en su vida de venir a Rusia, no lo duden"
Asimismo, la Copa, según el reportero mexicano, no solo regaló una fiesta inolvidable a todos los amantes del fútbol y los que no pudimos quedarnos aparte de las celebraciones sino que nos sirvió de gran lección haciéndonos entender que hay más que nos une que nos separa.
"Estos eventos sirven para eso. Como los Juegos Olímpicos, el Mundial, en fin, son una serie de eventos deportivos que unen a muchas naciones en una misma ciudad, y se demuestra que pueden convivir sin ningún problema y esta convivencia humana supera los conflictos políticos que existen fuera, dentro de los gobiernos y entre las naciones", manifestó.
Enrique reconoció que antes de venir también era víctima de ciertos estereotipos sobre Rusia y sus habitantes. Pero todos los prejuicios y miedos se disiparon al encontrarse cara a cara con "la gente rusa muy distinta a la que pensábamos".
"Sí, existe este mito de Rusia en Latinoamérica, yo creo que es más bien un desconocimiento de lo que en realidad es Rusia. No se conoce más de lo que alguien quiere que sepamos de Rusia pero ya llegando aquí te das cuenta de que no es verdad, es otro tipo de país", explicó.
No te lo pierdas: Dawits Buitrago: "Lo que hemos encontrado en Rusia es una maravilla"
Cada viaje tiene su fin. Pero lo que vio, vivió y entendió aquí, en este país tan lejano de su patria y tan desconocido hasta este verano, siempre le quedará. Así que llevará consigo "una grata impresión" y recuerdos de "un país increíble, una gente maravillosa".
"De verdad, me voy muy contento de Rusia. Siento ya la nostalgia de tener que irme", confiesa Enrique Cancino.