Mientras que los costos de desarrollo del caza están por las nubes, se prevé lanzar casi 3.000 aviones que compartirán el costo por unidad entre ellos. Más de dos tercios de los cazas F-35 están destinados al Ejército de EEUU y los pedidos estadounidenses son vitales para reducir los costos unitarios del caza, explica el portal.
"De esta manera, el programa de combate más caro de la historia, producido en cantidades suficientemente grandes, puede sacar a la luz una plataforma competitiva en precio y al menos algo rentable".
Para comparar, el desarrollo del F-22 Raptor costó mucho menos que el del F-35, pero una producción pequeña de tan solo 187 Raptors hace que este avión cueste aproximadamente el doble que un F-35.
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La economía de escala ha sido una ventaja clave de los aviones de combate ligeros de EEUU frente a las plataformas rivales producidas por los fabricantes de la competencia. El F-16 también se produjo en grandes cantidades, con más de 4.500 unidades que entraron en servicio en Estados Unidos y sus aliados por todo el mundo. La clave del éxito fue su bajo costo unitario y la competitividad de precios debido a la alta demanda del propio Ejército de EEUU.
"El F-35 se convertirá en el caza moderno más barato y, probablemente, más rentable fabricado en Occidente", asegura el artículo.
Los autores explican que China y Rusia también pueden beneficiarse de la economía de escala para sus programas de combate debido a la elevada demanda interna, pero los productores europeos no lo pueden hacer.
Incluso el nuevo caza ligero sueco Gripen E, comparable con el F-16 de EEUU, costará más que el F-35. Los aviones de combate europeos de dos motores, como el Rafale y el Eurofighter, aunque carecen de las tecnologías de quinta generación, también van a costar mucho más por unidad que el F-35.
Como resultado, el F-35 podría "eliminar casi por completo las plataformas europeas de los mercados de exportación", concluye el medio.
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