"El presidente ya ha sido claro que su convicción sobre la importancia de dar un debate republicano implica respetar el resultado de ese acuerdo y no vetar la ley", indicó Peña luego de una reunión con los ministros.
Peña afirmó que la relación del Gobierno con la Iglesia Católica y los demás cultos es "muy buena", ya que siempre ha sido muy respetuoso "de su palabra, del diálogo, no sentimos que haya un conflicto por el tema de que se haya habilitado un debate" sobre el aborto.
En febrero pasado, Macri dio el aval a sus legisladores para que abran la discusión sobre el aborto en el parlamento.
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El Senado de Argentina comienza a debatir este 10 de julio el proyecto de ley para legalizar el aborto, que ya tiene media sanción tras haber sido aprobado en Diputados.
La 'grieta' se traslada al debate legal por el aborto en Argentina https://t.co/xo8ZM05i9Y
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 7 июля 2018 г.
La reunión plenaria de las comisiones de Salud, de Justicia y Asuntos Penales y de Asuntos Constitucionales analizará el proyecto de ley en revisión sobre régimen de Interrupción voluntaria del embarazo.
Los expositores serán alrededor de 60 y entre ellos habrá abogados, médicos, psicólogos, que ya se expresaron en Diputados, que hablarán distribuidos en siete audiencias que se desarrollarán los martes y miércoles para llegar a la firma del dictamen el 1 de agosto, según el cronograma fijado, añade el medio.
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El 24 de julio el Senado recibirá al actual ministro de Salud, Adolfo Rubinstein, y al extitular de esa cartera Ginés González García.
El proyecto reconoce el pleno derecho de una mujer a interrumpir su embarazo hasta la semana 14 de gestación, además de mantener sin plazos las causales establecidas en las normativas actuales.
De momento, la interrupción del embarazo está despenalizada en Argentina solo si este fue producto de una violación, si el feto presenta malformaciones graves o si está en riesgo la salud física, psíquica o social de la mujer.
