"Si nosotros como países no respetamos la institucionalidad, las instituciones, los procesos que siguen las instituciones (de otro país) estamos interviniendo en los asuntos internos de ese país", dijo Moreno.
Esta semana los presidentes Nicolás Maduro, de Venezuela, y Evo Morales; de Bolivia, se pronunciaron en contra del proceso penal y la orden de prisión que enfrenta Correa por supuestamente autorizar el secuestro del político opositor Fernando Balda en 2012.
Según Maduro y Morales, se trata de una persecución política contra Correa.
El Gobierno de Ecuador presentó notas formales de protesta y convocó a los embajadores de ambos países "para que expliquen la postura de sus gobiernos".
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El martes pasado, la justicia ecuatoriana dictó un pedido de prisión preventiva de Correa, quien vive en Bélgica desde 2017, por su presunta vinculación con el secuestro de Balda en 2012.
La jueza Daniella Camacho aceptó el pedido de la fiscalía de sustituir la medida cautelar de presentación periódica ante la justicia por la de prisión preventiva luego de que Correa incumpliera la orden de comparecer cada 15 días ante la Corte Nacional de Justicia desde el lunes pasado.
La magistrada pidió asimismo a la Interpol una alerta roja para la captura de Correa con fines de extradición.
El exmandatario ha insistido en que todo es parte de un "complot" para sacarlo de la vida política del país y no ha descartado pedir asilo político a Bélgica.
