En el marco de esta maniobra fiscal las autoridades rusas planean reducir a cero los derechos de exportación del actual 30%. Esta reducción se realizará de forma paulatina durante los próximos seis años y empezará a implementarse en enero del 2019, según informa el portal de la Duma Estatal —Cámara Baja del Parlamento ruso—.
"La contribución del impuesto sobre la extracción de minerales en las arcas públicas de Rusia es mayor que la de los derechos de exportación, que las autoridades rusas planean reducir a cero", explicó a los medios el presidente de la Unión de Productores de Petróleo y de Gas de Rusia, Guennadi Shmal.
Como resultado de la implementación de esta reforma petrolera, será más beneficioso exportar petróleo al extranjero. Los productores de crudo y los representantes del ministerio de Hacienda —principal artífice de la reforma— han discutido esta iniciativa durante más de dos años. En el transcurso de sus debates, siempre han planteado la pregunta acerca del incremento del precio de gasolina. Se cree que su implementación será capaz de conducir a que suba el precio del combustible. Esta es la razón por la que la reforma ha sido duramente criticada.
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Sin embargo, el vice primer ministro de Rusia, Dmitri Kózak, destacó anteriormente que los pronósticos acerca del alto precio de gasolina no llegarán a cumplirse. Según el político, el Gobierno ruso dispone de las suficientes herramientas para poder prevenir la brusca y excesiva subida de precios de combustible.