El columnista de Sputnik Nikolái Protopópov discutió con analistas militares sobre las dificultades por las que atraviesa Ucrania. Según el periodista, para realizar reparaciones son imprescindibles piezas de repuesto.
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El mantenimiento del armamento ucraniano sin piezas de repuesto rusas se está haciendo imposible, añadió Román Gusárov, especialista en aviación y editor jefe del portal Avia.ru.
"Lo tendrían mucho más fácil comprando equipos o nuevos aviones rusos, pero Ucrania no se lo puede permitir", dijo.
La OTAN como solución del problema
Uno de los últimos proyectos de modernización que está barajando Ucrania es la adaptación de sus bombarderos Su-24 a los estándares de la OTAN. Así, la dirección de la planta de aviación de Odesa presentó sus planes de modernización a los agregados militares de la Alianza Atlántica y está convencida de que van a ser viables.
Los renovados bombarderos se llamarán Su-24MR, y la mayor parte de los cambios estará relacionada con el equipamiento radioelectrónico de los aviones. De hecho, se prevé que el 'exbombardero' cumpla las funciones de reconocimiento.
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A pesar del entusiasmo de los constructores ucranianos, los especialistas militares ponen en duda la posibilidad de que los aviones puedan formar parte del sistema de la OTAN.
Uno de los mayores obstáculos será la aprobación por parte de la jefatura de la alianza, explicó el piloto y doctor en ciencias técnicas Vladímir Popov. En particular, se trata del sistema de identificadores 'amigo-enemigo'.
"Al proporcionar este sistema, la OTAN estaría revelando parte de sus secretos, pues dicho sistema es muy importante para las fuerzas de defensa antiaérea durante un conflicto militar", señaló Popov.
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Por su parte, Gusárov considera que los intentos de relacionarse con la OTAN tienen un carácter más bien económico. Los políticos ucranianos simplemente intentan mostrar que aún tienen cierto armamento que sigue funcionando para que la OTAN les preste ayudas económicas destinadas a su modernización.
Intentos de modernización fallidos
El tema de la renovación y mejora de equipos militares está en auge en Ucrania, especialmente después de que comenzaran las operaciones militares en Donbas, mencionó el columnista.
Al mismo tiempo se realizó la modernización de tanques T-64BM Bulat, que no resultaron ser aptos para el combate por su peso excesivo, combinado con un motor poco potente.
El mismo destino corrió el vehículo blindado de apoyo Strazh (que toma como modelo el mismo tanque T-64) y los transportes blindados Azovets, Ovod y Varán. Ninguno de ellos llegó a la producción en serie. Según concluyó el columnista, "no fue por falta de deseo, sino por falta de dinero".
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