"Gretel estuvo muy cerca de nuestra compañía desde los primeros cursos de verano que impartimos (hace dos años), vinculados al proyecto Rutas y Andares que auspicia la Oficina del Historiador de La Habana, y ella siempre estuvo en estos talleres, siempre quiso acercarse a la compañía", comentó la directora de la Compañía Irene Rodríguez.
"Pero tenía tanto talento y tanta vocación, que hablé con ella para que se preparara como profesora profesional de nuestra compañía", aseguró.
"Me reía con ella porque siempre tenía una sonrisa a flor de labios, se sobrepuso a sus condiciones físicas para bailar, a sus condiciones geográficas, pues en la capital es donde se reúnen las mejores compañías danzarias, las mejores escuelas para danzas españolas y ella era de la ciudad de Holguín (a 750 kilómetros al este de la capital); le era muy complicado poder educarse de una manera profesional, y se instaló temporalmente en la capital para seguir su vocación de bailar", comentó Rodríguez.
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La directora de la academia aseguró que hay que "reconocer como un mérito enorme" que aun cuando tenía una vocación enorme, Gretel "buscaba seguir superándose y estudiaba además una carrera en la Ciudad Universitaria José Antonio Echeverría".
"Entrenaba todo el día como bailarina y estudiaba una ingeniería en la noche. Eso es un mérito enorme de una persona que siempre quiso superarse y trató de ser mejor, con muchas luces para ser artista, pero también para tener una carrera por si algún día no podía seguir bailando", enfatizó Rodríguez.
Inspiración para todas
Sputnik conversó también Mara de Armas, una de las maestras de la joven fallecida a su paso por la Escuela Profesional de Danzas Españolas.
"Daba gusto verla dando una clase –recordó la joven maestra-, su actitud ante sus maestros, escuchaba, atendía, corregía al momento los señalamientos, interiorizaba lo que le decías, estaba concentrada en lo que quería", añadió.
También la recordó Dreisy Sánchez, compañera de cuerpo de baile, quien aseguró que Gretel "fue una de las personas que me enseñó a bailar de verdad, me decía qué había que bailar con el corazón. Era una inspiración para todas".
Grettel Landrove falleció el 21 de mayo pasado después de permanecer durante tres días en un hospital de La Habana, donde fue internada después de sobrevivir al accidente aéreo ocurrido el 18 de mayo, que dejó un saldo de más de cien muertos.
