"El objetivo número nueve del Plan Nacional de Educación (PNE) (2014) determinó una reducción de la tasa de analfabetismo hasta el 6,5% en 2015 y su erradicación en 2024; el país no cumplió la primera parte del objetivo, puesto que en 2017 la tasa nacional de analfabetismo en personas mayores de 15 años fue estimada en 7%", informó este organismo gubernamental.
Ese 7% de la población equivale a 11,5 millones de personas, 300.000 menos que en 2016 (cuando la tasa era del 7,2%).
Según el estudio del IBGE las diferencias en los avances no vienen determinadas solo por la geografía, sino también por el color de la piel: el 4% de los blancos son analfabetos, frente al 9,3% de los negros, más del doble.
Las cifras también muestran que las tasas de escolarización de niños y adolescentes avanzaron en todas las franjas de edad, pero que aumentó el número de jóvenes que ni estudian ni trabajan.
Te puede interesar: Reformas educativas apuntan a suprimir el pensamiento crítico en América Latina
En el año 2016 ese grupo de población era un 21,9% de los 48,5 millones de personas de entre 15 y 29 años.
Sin embargo, en 2017 los brasileños que ni estudian, ni trabajan, ni se están formando de alguna manera ya eran el 23% de la población (11,2 millones de personas).
