Un miembro del Comité de las Fuerzas Armadas, Mike Gallagher, calificó esta medida como un intento de EEUU de "presionar a Rusia para que cumpla" el Tratado INF, escribe el diario.
En los últimos años, Moscú y Washington se han acusado en varias ocasiones de desarrollar sistemas que violan este pacto.
Mientras tanto, Moscú tiene serias preguntas sobre el cumplimiento del tratado por Washington. En particular, EEUU despliega en Rumanía y Polonia instalaciones capaces de lanzar misiles de crucero tipo Tomahawk, lo que está prohibido por el tratado. Además, EEUU está desarrollando drones de ataque y financia proyectos de creación de misiles de crucero con base en tierra.
El Tratado INF sobre misiles de alcance medio y más corto, firmado entre Washington y Moscú en 1987, no tiene fecha de caducidad y prohíbe a las partes disponer de misiles balísticos terrestres o misiles de crucero con un radio de acción entre los 500 y los 5.500 kilómetros.