En las maniobras de la OTAN en el Atlántico de 2005, un submarino sueco tipo Gotland logró pasar por delante de los buques que escoltaban al portaviones estadounidense Ronald Reagan, entrar en la 'zona roja', disparar varios torpedos de ejercicios contra su casco y huir sin que lo detectaran.
Un portaviones de la clase Nimitz, como el Ronald Reagan, de 4.500 millones de dólares, es capaz de transportar el doble de aviones y helicópteros en comparación con cualquier otro barco extranjero. Mientras tanto, un sumergible tipo Gotland cuesta alrededor de 100 millones de dólares, como un solo caza F-35. Pero parece ser más útil.
Más: Los grupos de ataque de portaviones: el arma y el músculo geopolítico de EEUU
El pequeño submarino de 1.600 toneladas de desplazamiento se destaca por su propulsión independiente de aire, motores de ciclo Stirling, que son más silenciosos que los diésel y permiten permanecer mucho tiempo bajo el agua.
Estupefacción en Occidente: "¿Adónde fue a parar el submarino ruso?" https://t.co/WNznCsHQPH
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 26 de diciembre de 2017
Los submarinos clase Gotland de la Armada de Suecia se construyeron entre 1992 y 1997. El buque, de 60,4 metros de eslora, es capaz de alcanzar una velocidad de 20 nudos. Su tripulación es de 27 personas. Cada submarino está armado con cuatro tubos lanzatorpedos de 533 mm y dos de 400 mm.