"Una propaganda que tiene por objetivo destruir una candidatura ajena puede generar una configuración de abuso de poder y puede llevar a una casación (anulación de la candidatura)", explicó el juez, que añadió: "Si el resultado de las elecciones es fruto de "fake news" (noticias falsas) capaces de tener esa dimensión, se anula la elección".
El juez también explicó que de cara a los comicios se están formando comités de inteligencia junto con la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin), integrantes del Ejército y la Policía Federal para detectar este tipo de artimañas.
Según Fux el Ministerio Público (Fiscalía) sigue de cerca esos trabajos y el Poder Judicial sólo actúa cuando es requerido.
Sobre los trabajos realizados hasta ahora en este sentido el juez explicó que el TSE exigió explicaciones a una empresa extranjera acusada de difundir noticias falsas en Brasil, aunque no citó el nombre de la firma.
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Brasil celebra elecciones el próximo mes de octubre en un clima muy imprevisible; el favorito en las encuestas es el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011), quien está cumpliendo una pena de 12 años y un mes de cárcel y a pesar de ello sigue siendo el pre-candidato del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT).
