"Durante el registro de un laboratorio químico de los radicales fue descubierta una gran cantidad de la sustancia hexamina, lo que demuestra una vez más que los yihadistas se dedicaban a la elaboración de armas químicas", dijo Rodiónov.
Varios grupos de la oposición y ONG relacionadas responsabilizaron al Gobierno de Siria por el ataque químico contra la ciudad de Duma, que supuestamente tuvo lugar el 7 de abril.
A solicitud de Damasco y Moscú —que han desmentido el presunto ataque químico al calificarlo de un montaje— la Secretaría Técnica de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) decidió enviar un grupo de expertos a Duma.
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El presidente ruso, Vladímir Putin, calificó el ataque de EEUU y sus aliados de una agresión contra un Estado soberano y remarcó que ni los residentes locales, ni los expertos militares rusos confirmaron el presunto ataque químico en Duma que sirvió de pretexto para los bombardeos de la 'troika' occidental.
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Según un informe de la OPAQ, las inspecciones realizadas en noviembre de 2017 en los centros de investigación de Barza y Jamraya —una de las instalaciones bombardeadas por Occidente— no revelaron irregularidades.
