"Celebramos el hecho de que España y Venezuela han acordado comenzar un proceso de normalización de sus relaciones diplomáticas", dijo en rueda de prensa el portavoz comunitario Carlos Martín Ruiz De Gordejuela.
Según explicó, el Ejecutivo comunitario se encuentra "completamente comprometido" con el objetivo de "ayudar a Venezuela a encontrar una solución pacífica y democrática" ante las "múltiples crisis" que a su modo de ver atraviesa el país.
El pasado mes de enero las relaciones entre Madrid y Caracas pasaron por una fase de enfriamiento después de que la Unión Europea sancionase a siete altos funcionarios venezolanos, una acción que contó con España como uno de sus principales impulsores.
En respuesta, el Gobierno de Venezuela decidió expulsar al embajador español en Caracas, Jesús Silva Fernández, lo que fue respondido con medidas de reciprocidad por parte de España, que declaró persona non grata a Mario Isea, embajador venezolano en Madrid.
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Pese a este paso hacia la normalización de las relaciones, el diálogo entre ambas partes aún parece lejano, sobre todo después de que el secretario de relaciones internacionales del Partido Popular, José Ramón García-Hernández, afirmara que España liderará en el plano internacional un movimiento para el desconocimiento de las próximas elecciones presidenciales en Venezuela.
Aunque Madrid todavía no fijó una posición definitiva, distintos miembros del Gobierno, incluido Rajoy, manifestaron en repetidas ocasiones sus dudas sobre la legitimidad de esos comicios.
