Según la agencia, se trata del defecto de la capa protectora contra corrosión para piezas de aluminio.
A pesar de estos problemas, Lockheed Martin anunció su intención de alcanzar para este año su objetivo de entrega de 91 aviones.
Anteriormente, debido a la mala calidad de las aeronaves 'más modernas', Australia y Canadá se negaron a comprarlas. El año pasado, los defectos se detectaron en 200 aviones, es decir, la mayoría absoluta de los que ya se habían producido, recuerdan Alexéi Necháyev y Andréi Rézchikov en su artículo para el diario Vzglyad.
Mientras tanto, en enero de este año, el Pentágono admitió que solo el 50% de los aviones están listos para el combate, y este número no ha aumentado desde octubre de 2014, aunque las reparaciones están en curso. Desde entonces, los fabricantes tuvieron que actualizar el software 31 veces, lo que no ayudó a corregir alrededor de otros mil fallos, señalan los periodistas.
El Pentágono enumera 1.000 deficiencias en el costoso F-35 https://t.co/UwMkGqmCYu
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 29 de enero de 2018
Asimismo, resultó que las modificaciones F-35B para los marines y el F-35C para portaviones no pueden reabastecerse en el aire. Los defectos detectados afectan también a la precisión de lanzamiento de misiles AIM-120 aire-aire, así como municiones aire-superficie.
El responsable del programa F-35, el vicepresidente de Lockheed Martin, Jeff Babione, también reconoció que la aeronave tenía problemas para garantizar la baja visibilidad del avión debido a los daños en el recubrimiento. Culpó principalmente a sus propios trabajadores por haber aplicado mal la capa especial.
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También se supo que muchos de estos cazas, rápidamente se cubrían de óxido, por lo que el Pentágono ya había suspendido la recepción de estos por un mes.
Por si fuera poco, en el otoño del año pasado los pilotos se quejaron de síntomas de falta de oxígeno después de los vuelos en el F-35.
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Sin embargo, el director del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías, Ruslán Pújov, opinó que es normal que un programa tan complicado como el F-35 tenga problemas y aseguró que aún no ha alcanzado el máximo de sus capacidades, pero cuando esto suceda, "se convertirá en un arma absolutamente mortal".
"Cuando nuestros vecinos noruegos lo tengan en servicio, es posible que Rusia tenga problemas muy graves. Tenemos que acelerar nuestro trabajo en el avión de quinta generación, porque solo él, una vez puesto en producción en serie, podrá responder adecuadamente a los desafíos de seguridad y frenar la amenaza del F-35", citan los periodistas al experto.
En marzo pasado se informó que Lockhead Martin no está cumpliendo con los plazos de la undécima tanda de aviones de combate.
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