Los agentes entraron en la sede de Diplocat, en la avenida Diagonal de Barcelona, esta misma mañana.
La Guardia Civil están registrando varios despachos, según informa TV3, "en busca de documentación relacionada con la contratación de los observadores internacionales, que un informe de la Guardia Civil estima costó 119.700 euros".
El registro se produce solo un día antes del cierre de todas las oficinas de la diplomacia catalana que dependían de la consejería de Exteriores de Raül Romeva en aplicación del artículo 155.