"Presentamos el régimen de integración urbana y regularización dominial para convertir las villas y asentamientos del país en barrios con acceso a los servicios públicos y en los que las familias accedan al título de propiedad", dijo el diputado presidente del bloque PRO, que integra Cambiemos, Nicolás Massot, a través de la red social Twitter.
Junto a @elisacarrio y @marioraulnegri presentamos el régimen de integración urbana y regularización dominial para convertir las villas y asentamientos del país en barrios con acceso a los servicios públicos, y en los que las familias accedan al título de su propiedad
— Nicolás Massot (@Nicolas_Massot) April 12, 2018
Por su parte, el diputado Mario Negri, presidente de la Unión Cívica Radical, que integra la alianza gobernante, afirmó que la iniciativa "será un paso clave para la principal política de Cambiemos: la lucha contra la pobreza".
La normativa "conllevará el esfuerzo de nación, provincias y municipios y esto se traducirá en más y mejor federalismo", agregó Negri.
La presidenta de la bancada de la Coalición Cívica, también de Cambiemos, Elisa Carrió, afirmó que "es un avance extraordinario, cuando la persona tiene domicilio y propiedad tiene identidad y ciudadanía, derechos humanos básicos".
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El proyecto declara de interés público los asentamientos precarios identificados en el Registro Nacional de Barrios Populares en Proceso de Integración Urbana, creado en 2017.
De acuerdo al Ministerio de Desarrollo Social, el 61% de los terrenos están a nombre de propietarios particulares, el 13% pertenecen a municipios, el 7% son provinciales, y otro 13% no tienen información catastral.
Por "barrio popular" el Gobierno hace referencia a aquellos en los que viven agrupadas al menos ocho familias, en zonas donde más de la mitad de sus habitantes no tienen título de propiedad del suelo ni acceden como mínimo a dos de los servicios básicos (red de agua corriente, red de energía eléctrica con medidor domiciliario o red cloacal).
De los 44 millones de habitantes de Argentina, unas 3,5 millones de personas viven en este tipo de asentamientos, conocidos en el país como villas miseria, según el Ministerio de Desarrollo Social.
Opinión de organizaciones sociales
El número de barrios precarios asciende a 4.329 y allí viven más de cuatro millones de personas, según varias organizaciones sociales que trabajan en estos terrenos, como Barrios de Pie, Corriente Clasista y Combativa, la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular y Techo.
Esas cuatro organizaciones fueron parte del proceso de identificación de los barrios precarios, ahora reconocidos en el Registro Nacional.
Además de otorgarse la titularidad de las tierras en estos lugares, las agrupaciones reclaman que se realicen obras para el acceso a los servicios públicos, que se construyan centros educativos, culturales, de salud, y que se facilite la llegada del transporte público y que se realice la recolección de residuos.