El Ministerio Público considera necesario enviarle a prisión mientras estudia la documentación de la nueva reclamación de extradición a Suiza.
Las informaciones de este informático permitieron perseguir a más de 600 defraudadores en España.
Varios políticos, activistas y periodistas españoles mostraron su sorpresa y calificaron de "escándalo" que la policía española detuviese a Falciani.
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"El arresto y amenaza de extradición de Falciani es un escándalo democrático: hombre clave en la lucha contra la corrupción, colaborador de las autoridades españolas para perseguir el fraude fiscal y también nos ha asesorado en el Ayuntamiento de Barcelona para mejorar transparencia", aseguró la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que terminó su mensaje en la red social Twitter con un "Libertad Falciani".
Tras detenerle, la Audiencia Nacional le dejó en libertad mientras tramitaba su extradición porque Falciani "estaba colaborando con las autoridades judiciales de varios Estados europeos", entre ellos España.
En 2013, se rechazó la extradición a Suiza alegando que no se daba el principio de doble incriminación, es decir, que los delitos de los que le acusaba Suiza no tenían reflejo en el Código Penal español.
