"¡Ya está! Kommersant ha obtenido los 'archivos secretos' en los que se basa la decisión de EEUU y los países europeos de expulsar a los diplomáticos rusos", declaró Zajárova. La funcionaria también calificó el informe como un "fracaso de Theresa May".
"Se desveló la manipulación de la opinión pública mundial más extensa en la que están involucradas las autoridades del Reino Unido. Miren. Han tomado una decisión sobre la implicación de un Estado en un ataque químico basándose en seis imágenes", indicó.
Una de las páginas del documento muestra la cronología de los hechos en el atentado contra el exagente Skripal, su hija y un oficial de la policía inglesa, además de un mapa con las localizaciones clave del incidente.
4 de marzo: tres personas son expuestas a un agente nervioso en Salisbury
8 de marzo: la delegación del Reino Unido en la OPAQ informa a la Secretaria Técnica que dos personas se han puesto gravemente enfermas
12 de marzo: la primera ministra identifica la sustancia como el gas nervioso A234 Novichok y pide explicaciones al embajador ruso
13 de marzo: expira el plazo límite hasta la medianoche, no hay explicaciones [de Moscú] sobre el caso
14 de marzo: la primera ministra establece el plan de respuesta de Londres
14 de marzo: la primera ministra se dirige a la OPAQ
18 de marzo: Rusia anuncia medidas de represalia
19 de marzo: un equipo de la OPAQ llega al Reino Unido
20 de marzo: 23 oficiales de la inteligencia rusa son declarados personas 'non gratas' en el Reino Unido
Otra página de la presentación está dedicada a los efectos de la sustancia en el organismo humano. Según el texto, este ha sido el "primer caso del uso de armas químicas en el territorio de Europa desde la época de la Segunda Guerra Mundial".
"No tenemos ninguna duda de que Rusia es responsable. Ningún país aparte de Rusia pudo combinar la capacidad, el intento y el motivo. No hay otras explicaciones plausibles", reza el informe.
El documento también contiene ejemplos de otras "actividades malintencionadas" de las cuales se culpabiliza a Moscú, como el envenenamiento del exagente Alexandr Litvinenko en 2006, la interferencia del Kremlin en las presidenciales de EEUU en 2016, los ataques cibernéticos contra Estonia, Alemania y Dinamarca, así como la invasión de Georgia en 2008, la desestabilización de Ucrania y el derribo del avión de pasajeros MH-17 en julio de 2014, asegura el informe.
El texto también informa de las medidas que ha tomado Londres para hacer frente a las actividades de Moscú. En particular, se trata del "desmantelamiento de una red de agentes de inteligencia rusa en el Reino Unido", la suspensión de todos los contactos bilaterales entre Londres y Moscú, el reforzamiento del control fronterizo, la lucha contra la delincuencia y la corrupción y la creación de una nueva legislación.
Serguéi Skripal, exoficial de la inteligencia militar rusa reclutado en la década de los 90 por el servicio secreto británico MI6, y su hija Yulia fueron hallados inconscientes el 4 de marzo cerca de un centro comercial de la ciudad de Salisbury.
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La primera ministra británica responsabilizó a Rusia del incidente y calificó el episodio como un intento de asesinato. Asimismo, anunció la expulsión de 23 diplomáticos rusos y la cancelación de todos los contactos de alto nivel entre ambas naciones. Por su parte, 25 países —entre ellos EEUU y Ucrania— siguieron el ejemplo de Londres y expulsaron a varios diplomáticos rusos por el caso Skripal.
