"La Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario condenó al Gobierno porteño", informaron fuentes judiciales consultados por Sputnik.
Tras fallar en su contra un juez de primera instancia, el Poder Ejecutivo apeló la sentencia bajo el alegato de que no había relación entre la muerte del niño y su situación de calle, dado que los padres no habían aceptado ingresar a un refugio.
Cuando la madre estaba embarazada, le fue sugerida la opción de enviarla a este establecimiento, pero la familia rechazó la oferta "ya que no los dejaban llevar sus pertenencias y no podían permanecer allí durante el día", según consta en el expediente.
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El tribunal sostuvo que la alcaldía de Buenos Aires había reconocido en un comienzo la prioridad del caso al otorgarle un subsidio habitacional, pero después no se renovó el ofrecimiento, por lo que el Gobierno incurrió en una falta de servicio.
El Poder Ejecutivo a cargo de Macri también había sido advertido del peligro que suponía para la madre y el recién nacido el hecho de encontrarse en situación de calle.
La justicia consideró probado que al momento de nacer el bebé, la familia, compuesta por los padres y cinco menores de edad, vivían en la calle desde hacía varios meses, así que la alcaldía de la capital argentina tenía conocimiento de la situación crítica que atravesaba el grupo familiar incluso antes del nacimiento del bebé, pese a lo cual no brindó una solución adecuada.