"Yo creo que a esta altura no tiene mucha relevancia hablar sobre los resultados (…) sabemos que Putin será reelegido otra vez y si cumple los seis años será el mandatario, después de Stalin, que más tiempo habrá estado en el poder en los últimos 200 años junto a Alejandro Primero, que estuvo también un cuarto de siglo".
De esa premisa parte el doctor en Relaciones Internacionales Alberto Hutschenreuter para analizar la trascendencia de estas elecciones en el plano local pero teniendo en cuenta el escenario internacional. El experto habla de tres capas cautivas de votantes que convierten al presidente en un líder intergeneracional.
"En primer lugar está lo que en Rusia llaman la generación Putin, jóvenes que nacieron en este siglo y no conocen otro gobernante. Muchos son indiferentes pero lo van a votar porque ha fortalecido a Rusia y entienden que la situación interna puede no estar muy bien pero que puede mejorar. Y Putin ha tenido un discurso optimista en cuanto a las posibilidad de modernización del país".
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La segunda capa "tiene hoy de 35 años para arriba —indica Hutschenreuter- y recuerda con horror la década del 90 cuando nació la Federación de Rusia" e imperaba la crisis "económica, política y social". La tercera capa la componen "los mayores aún nostálgicos de la Unión Soviética; más nostálgicos en realidad de Rusia como un poder que ha logrado respeto interestatal".
En este punto coincidió el licenciado en Relaciones Internacionales Martín Rodríguez Osses.
"La construcción de la identidad en Rusia tiene muchísimos años para atrás. Un ruso no es solamente quien es hoy, también quienes fueron sus padres, sus abuelos. Putin logró algo sensacional para la juventud que fue recuperar la gloria de sus abuelos y solucionar los problemas de sus padres".
El analista de la plataforma Equilibrium Global destacó que el reposicionamiento ruso en el mundo también explica el éxito político interno de Putin y resaltó la labor desarrollada por el canciller, Serguei Lavrov, que cumplió 14 años ininterrumpidos en el cargo.
Este domingo 18 de marzo están habilitados para votar más de 100 millones de personas, y si bien el sufragio no es obligatorio, hay sondeos que indican que participará más de 60% del padrón.
