"Corea del Norte parece estar actuando de forma positiva", dijo Trump.
El mandatario advirtió que "debemos esperar para ver cómo se desarrollan los acontecimientos".
Según la Presidencia surcoreana, se acordó celebrar una cumbre de los líderes de los dos países en abril, así como establecer línea directa entre los mandatarios para consultas y disminución de la tensión militar.
Además, Corea del Norte expresó el deseo de dialogar abiertamente con EEUU sobre la desnuclearización de la península y la normalización de las relaciones y dejó claro que no reanudará sus provocaciones mientras duren las negociaciones.
Aseguró también que no usará las armas nucleares ni convencionales contra su vecino del sur.
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"Espero que estemos yendo rumbo a un hermoso futuro de paz, pero debemos esperar a ver qué sucede", comentó Trump.
El presidente estadounidense calificó los últimos acontecimientos como "un diálogo muy positivo", pero advirtió que varias administraciones que le precedieron no lograron desmontar los planes norcoreanos de obtener armamento nuclear.
"Si miramos las anteriores administraciones, la administración de (Bill) Clinton (1993-2001), la de (George W.) Bush (2001-2009), la de (Barack) Obama (2009-2017), nunca funcionó", comentó Trump.
En 2017 Corea del Norte llevó a cabo una quincena de pruebas de proyectiles balísticos, incluyendo misiles intercontinentales capaces de alcanzar el territorio de EEUU, y el sexto ensayo nuclear, pese a las numerosas sanciones por parte del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas.
Estados Unidos reaccionó a las provocaciones de Pyongyang con la celebración de maniobras militares conjuntas con sus aliados en la región y el despliegue del escudo antimisiles norteamericano THAAD en el territorio de Corea del Sur.
