"Sobre la necesidad y urgencia de reforzar recursos humanos, especialmente en la Policía Federal y en la Policía de Carreteras, estamos autorizados a hacer concursos, con 500 nuevos agentes de la Policía Federal y 500 nuevos agentes de la Policía de Carreteras", afirmó el ministro, que añadió que esos concursos públicos se realizarán antes de que acabe el año.
En ese sentido prometió reforzar el área de combate a los crímenes de corrupción, recolocando a 20 comisarios en este sector.
También dijo que quiere más "policías en las calles" y aseguró que conversará con los gobiernos de los estados para acabar con la lógica que hace que muchos agentes se dediquen a tareas administrativas en vez de a patrullar.
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En Brasil la policía que se encarga de la seguridad de las calles es la Policía Militar, que es competencia de los diferentes estados, por lo que el ministro apenas tiene poder decisivo en este ámbito.
El nuevo ministerio de Seguridad Pública fue creado por el presidente de Michel Temer en el marco de la intervención federal en el estado de Río de Janeiro (sureste); su Gobierno apartó a los responsables regionales de la seguridad pública y en su lugar colocó a un general del Ejército.
Al ser preguntado por la posibilidad de que otros estados soliciten una intervención militar como la de Río de Janeiro el ministro aseguró que a pesar de que hay situaciones graves, no hay ninguna que demande otra intervención.
Desde el pasado 16 de febrero (cuando se decretó la intervención) todos los cuerpos policiales de Río de Janeiro, los bomberos, el servicio de inteligencia y la administración penitenciaria están bajo el control de las Fuerzas Armadas, situación que se prolongará al menos hasta el 31 de diciembre de este año.
