"Es un paso importante, pero España necesita tener mucho más peso en las instituciones comunitarias, mucha mayor presencia", dijo de Guindos en rueda de prensa desde Bruselas tras ser preguntado por su nombramiento.
El 20 de febrero, los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin), también dieron su apoyo a la postulación de De Guindos, que es el único contendiente para el puesto después de que Irlanda retirara su candidatura.
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El Consejo Europeo, compuesto por los jefes de Estado y de Gobierno del club comunitario, deberá decidir sobre la candidatura en la última semana de marzo, tras consultar las opiniones al respecto del Parlamento Europeo y del Consejo de Gobierno del BCE.
El ministro español reconoció que pasó "momentos difíciles" a la hora de realizar su trabajo en colaboración con la UE, sobre todo en marzo de 2012, cuando el Eurogrupo modificó el objetivo de déficit de España del 5,8% al 5,3%, obligando a un recorte de 5.000 millones de euros.
Pese a ello, De Guindos celebró que España está ahora consolidando "la recuperación económica" aunque admite que las heridas de la crisis financiera "no se cerraron del todo".
