"Las fuerzas del Gobierno sirio todavía no han entrado en Afrín y de momento no sabemos si entrarán o no", dijo el diplomático en una entrevista al canal televisivo 24 TV.
Al día siguiente, la agencia SANA informó que "fuerzas populares sirias" se desplazarían a Afrín en cuestión de horas para hacer frente a las tropas turcas y apoyar a los kurdos.
No se lo pierda: Turquía, cada vez más empantanada en Afrín: ¿qué le espera a Ankara?
Cavusoglu subrayó que siguen llegando declaraciones contradictorias.
"El lunes [19 de febrero] diferentes fuentes informaron sobre la entrada de las tropas sirias, pero más tarde el Gobierno de [Bashar] Asad lo desmintió", puntualizó.
Damasco, indicó Cavusoglu, aún no ha decidido qué es lo que constituye el peor mal en Afrín, la presencia de las YPG o de las tropas turcas.
"El Gobierno de Asad entiende que YPG trata de dividir Siria y es una organización terrorista", sostuvo el ministro turco.
"Es un problema de seguridad nacional", apostilló el jefe de al diplomacia turca.
El 20 de enero, Turquía y sus aliados del grupo opositor Ejército Libre Sirio (ELS) lanzaron en Afrín la Operación Rama de Olivo dirigida contra grupos yihadistas y las milicias kurdas, entre ellas las YPG, brazo armado del Partido kurdo de la Unión Democrática (PYD), movimiento que forma parte de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
Lea más: Milicias kurdas en Siria: "Resistiremos hasta el final en Afrín"
Sin embargo, a finales de enero el Pentágono admitió que había entregado armas a las FDS.
El 1 de febrero, las FDS afirmaron que habían matado a casi 480 militares turcos en Afrín en una semana.