"Sé que la situación actualmente está lejos de la que a todos nos gustaría ver", dijo Putin.
"Para nosotros es muy importante su punto de vista respecto a lo que pasa, para poder coordinar las posturas y elaborar enfoques comunes a la solución de este problema muy difícil", señaló.
Putin también comunicó que había mantenido este 12 de febrero una conversación telefónica con el presidente estadounidense, Donald Trump.
"Por supuesto, abordamos la solución al problema palestino-israelí", añadió el mandatario.
Infografía: Todo lo hay que saber sobre el conflicto palestino-israelí
Subrayó que Rusia siempre ha apoyado al pueblo palestino.
"En este ambiente, producto de las acciones de EEUU, declaramos que a partir de este momento rechazamos cooperar en cualquier forma con los estadounidenses en calidad de mediadores porque estamos en contra de sus acciones", dijo Abás.
El líder palestino enfatizó que su país aboga por un mecanismo negociador en que EEUU no sea el único intermediario.
"No nos oponemos a un formato de mediación multilateral, por ejemplo, el Cuarteto (de Oriente Medio integrado por la Unión Europea, la ONU, EEUU y Rusia) más algunos otros países como se hizo en el caso de pacto con Irán", afirmó Abás.
Según el presidente palestino, durante los contactos con el presidente de EEUU, Donald Trump, el líder norteamericano siempre habla de un acuerdo que pueda poner fin al conflicto árabe-israelí.
En lo que se refiere a la decisión estadounidense de trasladar su embajada a Jerusalén, Abás subrayó que Palestina nunca ha rechazado negociar con Israel.
A principios de diciembre pasado, Trump anunció la decisión de trasladar la embajada estadounidense en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, y reconocer esa antigua urbe como capital israelí.
Más aquí: Palestina se distancia de EEUU
La decisión fue condenada por la mayoría de los países musulmanes, donde se celebraron manifestaciones de protesta, y generó críticas de otros Estados e instituciones internacionales preocupadas por las perspectivas de paz en Oriente Próximo.
La Asamblea General de la ONU aprobó por amplia mayoría una resolución que declaró nula la decisión estadounidense de reconocer la capitalidad de Jerusalén y exhortó a todos los países a que se abstengan de establecer misiones diplomáticas en esa ciudad.
