Los resultados se han visto beneficiados por los tipos de cambio de las diferentes monedas y, por mercados, la hegemonía de la filial de Brasil "crece sobre todas las divisiones del grupo al obtener un resultado de 2.544 millones de euros, lo que supone el 26% del beneficio total y un 42% más que en 2016", señala la entidad.
España representa el 15% del total y ha elevado los beneficios un 46% al ganar 1.180 millones.
El crecimiento se logra a pesar de destinar 897 millones a cargos extraordinarios, entre ellos la integración del conocido Banco Popular en España, durante una polémica operación dado que compró la entidad por un euro, aunque implicaba cierre de oficinas y despidos de personal.
El Santander, el principal banco en España, adquirió el Popular tras su quiebra en junio pasado.
Sobre esta adquisición, Ana Botín, presidenta del Santander, afirma que la adquisición del Banco Popular ayuda al Santander a impulsar la estrategia y a recuperar el liderazgo en el mercado".
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El Santander asegura que tras la compra, ha mantenido "la base de clientes y la cuota de mercado del Popular, además, ha completado algunos hitos importantes, como la ampliación de capital de 7.072 millones; la venta a Blackstone del 51% del negocio inmobiliario, con un valor bruto contable de 30.000 millones de euros, que se convirtió en la mayor operación inmobiliaria de la historia en España".
