El ministro de Cultura de Chile, Ernesto Ottone, confirmó el deceso de Parra, creador de la antipoesía y varias veces candidato al premio Nobel de Literatura.
Nacido en la localidad de San Fabián de Alico el 5 de septiembre de 1914, Parra produjo una ruptura de magnitud sísmica en la poesía, a la que nutrió de nuevas estructuras y voces a partir de su libro "Poemas y antipoemas", de 1954, su segundo poemario, obra fundacional de la antipoesía.
Primero de ocho hermanos, entre ellos la cantautora Violeta Parra, otro pilar de la cultura chilena, el antipoeta obtuvo en 1969 el Premio Nacional de Literatura y en 2011 el Cervantes, uno de los más grandes reconocimientos de la literatura hispanoamericana, entre otras, muchas distinciones.
Pero quizás el máximo galardón haya sido la cantidad de poetas que tradujeron sus obras, entre los que destacan Allen Ginsberg, Lawrence Ferlinghetti, William Carlos Williams y Denise Levertov.
Sus poemas fueron traducidos al inglés, francés, ruso, checo y portugués, entre otros varios idiomas.
Recluido desde hace unos 20 años en su residencia en Las Cruces, su hogar era destino de admiradores y jóvenes aspirantes a poetas, y fue famosa su amistad con el escritor y poeta Roberto Bolaño (1953-2003).
En su poema "Manifiesto", de 1963, Parra escribió: "Para nuestros mayores/la poesía fue un objeto de lujo/pero para nosotros/es un artículo de primera necesidad:/no podemos vivir sin poesía".
Desde este martes, Chile se pregunta si podrá vivir sin la poesía de Nicanor Parra.