"No hay nada en la agenda del Consejo de Seguridad al respecto", dijo Umárov a periodistas.
Más temprano la embajadora de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, dijo a periodistas que su país procuraba organizar una sesión de emergencia para discutir las manifestaciones en Irán.
Umárov indicó que Haley habló con él sobre este asunto y agregó que "las discusiones están en marcha".
Sin embargo, el embajador sostuvo que no sabía cómo o cuándo podría celebrarse esa sesión.
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El representante de Kazajistán urgió asimismo al Gobierno de Irán y a los manifestantes a encontrar "puntos de coincidencia para negociar".
Umárov sostuvo asimismo que su país ha tomado la posición de "esperar y ver" lo que sucede en Irán.
Las protestas, que comenzaron en Mashhad (este) y se fueron extendiendo a otras ciudades, entre ellas Teherán, Isfahán (centro-norte) y Rasht (noreste), dejaron hasta el momento 21 muertos y un millar de detenidos, según diversos medios.
Los manifestantes reclaman mejoras económicas y protestan por la subida de los precios, en especial de los combustibles.
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El presidente de EEUU, Donald Trump, se refirió a las protestas iraníes y advirtió que su Gobierno estaba siguiendo de cerca la situación.
Su par de Irán, Hasán Rouhaní replicó que el mandatario estadounidense no tenía derecho a opinar sobre lo que ocurría con las protestas luego de haber calificado al pueblo iraní de "terrorista".