"Solo Al Qaeda, según diversas valoraciones tiene células en más de 80 países del mundo, incluyendo a EEUU y Canadá", afirmó en entrevista al periódico ruso AyF.
El alto funcionario explicó que "los cabecillas terroristas, al comprender la amenaza de aniquilación presente en las zonas que controlaban anteriormente, comenzaron a cambiar de táctica".
"Ahora se centran en la creación de células terroristas clandestinas autónomas en diversos países del mundo y en una amplia difusión de sus ideologías radicales", señaló.
En particular, el presidente ruso, Vladímir Putin, señaló que las formaciones terroristas internacionales representan una amenaza para los países de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) ya que buscan utilizar estas naciones como punto de apoyo para su expansión.
Más aquí: Putin: EEUU necesita asumir su culpa por la creación de Al Qaeda
Por su parte, el director del Servicio Federal de Seguridad ruso, Alexandr Bórtnikov, señaló que tras la derrota de los últimos baluartes de la organización internacional terrorista, Daesh sus líderes y miembros se ven obligados a buscar formas de continuar la actividad terrorista en el territorio de otros Estados, incluida la Federación de Rusia.