En la mañana del lunes 25 de diciembre, Tembin se encontraba a unos 330 kilómetros al este de la isla Con Dao y la velocidad del viento alcanzaba 135 kilómetros por hora. La fuerza del tifón, que había provocado más de 200 víctimas mortales a su paso por Filipinas, es equiparable al Linda, que azotó la región hace dos décadas dejando un saldo de más de 3.000 muertos o desaparecidos.
Typhoon #Tembin's structure looking a little ragged this evening. Expected to skirt along the Southern Vietnam coast during the next few days. pic.twitter.com/n8hsuDvDCM
— Johnny Parker (@JohnnyParker012) 25 декабря 2017 г.
"La fuerte tormenta, combinada con el alto oleaje, podría causar daños desastrosos si no somos precavidos", advirtió el domingo el primer ministro vietnamita, Nguyen Xuan Phuc.
Durante una teleconferencia con las provincias del sur, Phuc dio instrucciones para movilizar a soldados, policías y jóvenes a fin de que ayuden a reforzar los edificios, evacuar a los residentes de las zonas peligrosas y garantizar la seguridad de los trabajadores y las plataformas petrolíferas.
"Cancelen todas las reuniones innecesarias y céntrense en lidiar con la tormenta", insistió.
Solamente en la provincia de Bac Lieu se ordenó la evacuación de casi 350.000 personas. Las autoridades de Ca Mau reubicarán a unos 100.000 residentes; las de Ba Ria-Vung Tau, a 78.000 y las de Tien Giang, a 40.000.
El perjuicio es superior al del del año pasado, cuando los desastres naturales mataron a 264 personas y causaron daños por casi 1.750 millones de dólares.