"Irán, Rusia y Turquía declaran que existe una amenaza grave del minado premeditado y de la eliminación de monumentos históricos que forman parte del Patrimonio Cultural de la Unesco en Siria por parte de organizaciones terroristas", indica el comunicado conjunto.
El 21 de diciembre el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, reveló que la ciudad de Al Raqa está minada casi en su totalidad, ya que, además de las minas que los grupos radicales colocaban al retirarse, quedan muchos explosivos, por lo que la gente no puede entrar en sus viviendas.
El titular resaltó que la parte rusa hace todo lo que está a su alcance con sus propias fuerzas y está formando a zapadores sirios, pero necesita un serio apoyo, en particular, de las estructuras de la ONU.
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Este 22 de diciembre, Shoigú cifró en 6.533 hectáreas el territorio sirio limpiado hasta ahora de minas y explosivos por los zapadores rusos.