El jefe del Departamento de Ciencia Política y Sociología de la Universidad Plejánov de Economía de Moscú, Andréi Koshkin, señaló en Sputnik que ese crecimiento es "del todo lógico" y que la década de los 90 del siglo pasado fue un periodo difícil para la industria militar rusa, si bien desde entonces no ha hecho más que recuperarse. "Ahora podemos decir que Rusia ha logrado un gran éxito en la producción de armas y equipos militares", argumentó.
"Sobre todo [el éxito se debe a] la victoria sobre la organización terrorista más grande del mundo: Daesh. Se ha convertido en un ejemplo excelente de que nuestras armas y equipos militares cumplen con los estándares más exigentes de la industria armamentística. Además, nuestros expertos están preparados para instruir a aquellos que deseen utilizar esas armas tan bien como lo hacemos nosotros".
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Para Koshkin, Rusia es quien lleva la voz cantante en la industria militar.
Mientras tanto, Estados Unidos sigue intentando llevarse todos los laureles de la derrota en Siria de Daesh —grupo terrorista prohibido en Rusia y otros países-. "El régimen sirio y Rusia no han demostrado un enfoque serio o un compromiso para derrotar a Daesh y han protagonizado solo una pequeña parte de la operación contra los yihadistas", fueron las palabras del portavoz del Pentágono, Eric Pahon.
