"Está previsto que mantengamos nuestras bases militares en Siria —en Hmeymim y en Tartus— más allá de la operación antiterrorista y por tanto debemos prestar atención a cómo se desarrollarán en futuro", dijo el senador a Sputnik.
"Crear una base en el mar Rojo tiene ventajas incuestionables, es importante para nosotros consolidar las posiciones en la marcoregión desde el punto de vista geopolítico", afirmó.
El senador recordó que es el presidente de Rusia, Vladímir Putin, quien debe aprobar decisiones sobre creación de bases en el extranjero.
"Esto explica por qué (el presidente de Sudán) Omar al Bashir se dirigió a nosotros", indicó Bóndarev.
Más temprano, Bashir reveló a esta agencia que discutió con Putin y el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shogú, la posibilidad de establecer una base militar en el mar Rojo y denunció las pretensiones de EEUU de fragmentar Sudán en cinco naciones independientes.