"Condenamos rotundamente el bárbaro crimen en el Sinaí, Egipto, y confirmamos la posición primordial de Rusia que consiste en rechazar categóricamente y condenar cualquier ataque terrorista", señaló en un comunicado la Cancillería rusa, que expresó una "solidaridad total con las autoridades y el pueblo de Egipto en la lucha decidida contra el terrorismo y el extremismo".
"Estamos seguros de que los terroristas no lograrán amedrentar a la población ni infundir el sentimiento de miedo e inseguridad del mañana a los ciudadanos del país amistoso que es Egipto", dice el comunicado.
El ministerio ruso expresó sus sinceras condolencias a las familias de los fallecidos y deseó una pronta recuperación a los heridos.
"El Ministerio de Exteriores de Rusia recuerda que para los ciudadanos rusos que se encuentren en Egipto siguen vigentes las recomendaciones de tener precaución y evitar visitar las zonas de elevado riesgo terrorista", indica la nota.
Varios testigos afirman que los radicales tirotearon también a las ambulancias que llegaron al lugar para trasladar a los heridos.
Según la Fiscalía del país, en el atentado fallecieron al menos 235 personas y más de 130 resultaron heridas.
Se estima que en la mezquita, donde tenía lugar el tradicional rezo del viernes, día sagrado de los musulmanes, podían encontrarse unos 500 fieles.
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Las fuerzas de seguridad están llevando a cabo una operación para capturar a los atacantes.
El Gobierno egipcio decretó tres días de luto por los muertos en el atentado.
