"Primero definimos junto a nuestros socios que presentaremos oficialmente esta resolución solo en caso de que tenga la oportunidad (de ser aprobada), porque no queremos toparnos con un nuevo veto de Rusia", afirmó ante las cámaras del canal de televisión 112 Ucraina.
Según Elchenko, "quisiéramos que no fuesen solo palabras, sino que algo que se tornase real".
Según el representante ucraniano ante la ONU, la manzana de la discordia del tema es el lugar de ubicación de los cascos azules, ya que Kiev insiste en distribuirlos por todo Donbás mientras que Moscú estima que deben ubicarse solo en la línea de separación.
"Este punto es principal y clave, justamente al respecto, a mi entender, no logran llegar a un acuerdo EEUU y Rusia", afirmó, al señalar que además "hay muchas otras interrogantes".
En abril de 2014 el Gobierno ucraniano lanzó una operación militar contra las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, que surgieron tras el golpe de Estado en Ucrania en febrero de ese mismo año.
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Rusia apoya el envío de los cascos azules a Ucrania siempre y cuando su misión consista en garantizar la seguridad de los observadores de la OSCE y no se extienda más allá de la línea de separación entre las tropas del Gobierno ucraniano y las milicias, y califica los intentos contrarios de intento de ocupación de la región, lo que contradice los acuerdos de Minsk.
