"La proscripción del uso del hiyab se propaga cada vez más en los países europeos, de esa manera allí se intenta impedir la participación de las musulmanas en la vida social, las afirmaciones de que ellas deben permanecer en casa se difunden como un virus", dijo el líder turco en un discurso ante mujeres empresarias de países musulmanes.
Según Erdogan, la mayoría de los países de Europa obstaculizan los estudios y la actividad laboral de las mujeres con velos islámicos.
Según el presidente turco, su país es uno de los pocos que se hace eco de esas violaciones y de la política de doble rasero.
En 2013, el Gobierno de Erdogan, primer ministro de Turquía en aquel entonces, levantó la prohibición del hiyab para los funcionarios públicos que se había mantenido en vigor desde la fundación de la República de Turquía, en 1923.
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A partir de agosto del año pasado las mujeres policías turcas pueden usar el hiyab como parte de su uniforme.