"Estados Unidos puede esperar ver niveles crecientes de oferta y consumo por lo menos hasta el 2018", señaló el reporte del organismo.
En el mismo la DEA aseguró que "en la medida en que los cultivos de coca y la producción se incrementan en Colombia se verá un incremento en el número de muertos, en el número de iniciados por primera vez, decomisos y positivos en los sitios de trabajo".
Como consecuencia de ese incremento, algunos indicadores apuntan a que las muertes y el número de nuevos iniciados en el uso de cocaína en EEUU están a los mismos niveles del año 2007, cuando los cultivos ilícitos comenzaron a caer en el país en una tendencia que se mantuvo hasta el 2013.
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En consecuencia, advirtió el reporte, el mercado de coca en EEUU aumentó en los dos últimos años al punto en que "la cocaína es fácil de obtener a cualquier hora", principalmente en ciudades como Houston, Los Ángeles, Philadelphia y Washington.
Por otra parte, la DEA afirmó haber registrado un incremento del tráfico de coca desde Colombia hacia la Florida debido, según consideró, a que los narcotraficantes incrementaron las exportaciones para sacar toda la coca posible de las zonas controladas por las FARC antes de que entraran en vigor los acuerdos de La Habana, a comienzos de este 2017.
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Sin embargo, indicó que aún son inciertas "las implicaciones del proceso de paz en el tráfico de drogas", aunque insistió en que durante 2016 la entonces guerrilla de las FARC mantuvo el tráfico de drogas a EEUU en alianza con bandas criminales, pese a que en ese momento estaba en negociaciones de paz con el Gobierno colombiano.
