Según informa 324, el canal de noticias de la televisión pública catalana, la alcaldesa del municipio, Marta Madrenas, aprobó la medida por "dignidad institucional" después del discurso televisado de Felipe VI.
"He firmado dos oficios para anular cualquier posible coincidencia en actos oficiales con los responsables de la represión policial en Girona", escribió la alcaldesa en su cuenta de Twitter.
He signat dos oficis per anul·lar qualsevol possible coincidència en actes oficials amb els responsables de la repressió policial a Girona pic.twitter.com/9meoMCtUzc
— Alcaldessa de Girona (@alcaldessa_gi) 4 de octubre de 2017
El Ayuntamiento de Girona tampoco asistirá a los actos que organice la Fundación Princesa de Girona.
"Con sus decisiones han vulnerado de una manera sistemática las normas aprobadas legal y legítimamente, demostrando una deslealtad inadmisible hacia los poderes del Estado", dijo el monarca en una declaración institucional televisada.
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"Han socavado la armonía y la convivencia", afirmó el Rey, que acuso al Ejecutivo catalán de pretender "quebrar la unidad de España y la soberanía nacional, que es el derecho de todos los españoles a decidir democráticamente su vida en común"
El 1 de octubre tuvo lugar un referéndum de autodeterminación en Cataluña convocado de manera unilateral por el Gobierno catalán, una consulta que se celebró pese a que el Tribunal Constitucional de España la había declarado ilegal.
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El Gobierno central, en cambio, no reconoce la validez de ese referéndum que, además de haber sido ilegalizado por el Constitucional, según Madrid, no cumplió un mínimo de garantías procedimentales.
La jornada electoral se saldó con 893 personas atendidas por los médicos debido a la agresión policial, según el Departamento de Salud catalán; por su parte, el Ministerio del Interior de España menciona que hay 431 agentes heridos.
